“Los guerreros de Luis Enrique ya tienen nuevo horizonte”
“Para mí no es una noche triste, ni mucho menos. Esto es el deporte de elite: hay que saber ganar y saber perder”. Las palabras del seleccionador nacional están mejor traídas que nunca. ¿Es posible salir con la sensación de ser campeón, de haber ganado, cuando en realidad se ha caído derrotado?
En la vida, un emprendedor debe tener habilidades que le permitan aguantar los golpes del destino y superar las inevitables pérdidas. No importa lo difícil que sea el camino, siempre debe mantenerse el sueño del primer día. Es lo que te tendrá motivado y te rescatará de cualquier pensamiento débil.
En el caso de los guerreros de Luis Enrique, después de haber salido de la Eurocopa como lo han hecho, está claro que ya han emprendido su nueva ruta, el plan está trazado, y el horizonte no me cabe la menor duda de que lo visualizan. Entre otras razones, porque un país entero lo está haciendo.
Son jóvenes que apenas superan los veinte o veintidós años, hay un Mundial a la vuelta de la esquina, han acreditado talento, tesón, fuerza, garra, capacidad de superación interna y de remontada… han puesto de manifiesto, en definitiva, que disponen de la actitud del número uno.
Pensemos en voz alta por qué en tantos torneos hemos salido por la puerta de atrás, en medio de una gran desazón, de frustración, de rabia, de malas vibraciones… hoy no es así. Emocionalmente, nuestra selección, a pesar de haber sido apeada en semifinales, está en lo más alto. Es la mejor noticia para conquistar el próximo reto… que se encuentra en el Golfo Pérsico. ¡Hay equipo! ¡Hay futuro!
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